Esta semana encontré un recurso muy piola para reseñar este cuento: la versión en mp3 del texto en la web del Plan Nacional de Lectura.
Cuando escuchaba el cuento por un momento me acordé de Diario para un cuento de Cortázar porque me encontré con el autor hablando de la historia en esa difusa línea de lo que pasó en realidad con lo que pasó en la ficción construída finalmente.
El audio en sí es bastante más corto que Diario de un gato asesino, otro que subí a principio del año; pero ambos comparten el uso del humor y el plus que otorgan los efectos especiales.
Si les interesa leer más de este autor pueden ver mis reseñas de Cuentos ridículos, El mar preferido de los piratas y Eulato, un texto que también está disponible on line para leerlo legalmente desde el Plan Nacional de Lectura.