Dayana

Me parece como una publicidad de 1960, pero subida de tono para le época.

No se, la chica me gusta… así que no puedo hablar mal de la publi 🙂

No sé qué te asombra, Dayana, si ya sabemos que hasta para vender acuarelas para útiles escolares ponen minas con poca ropa. Mal gusto, sí, pero ya consagrado por el uso. Estoy esperando una propaganda de algún curso de catecismo con una angelita en bolas, sentada sobre un misal. Un beso Gracielaleo

Qué feo… tetas corrugadas!

Yo le voy a la chica 🙂

Hola Dayana. Es totalmente bizarra esa publicidad, pero prefiero algo así de bizarro que las de yogurths para el tránsito lento y de jabones de la ropa que limpian hasta lo imposible.
Creo que la publicidad en general está pasando por una época olvidable. Los creativos están demasiado fumados.

Saludos.

Coincido con Graciela sobre la publicidad.

La involución de nuestra especie, que se jacta en autodenominarse Homo “sapiens”, demuestra cada vez más el desprecio de la razón, para dar lugar a lo obsceno, ridículo, vulgar y morboso.

Lamentablemente la mujer -me refiero a la gran mayoría, no a todas- cada vez más se constituye como objeto y no sujeto, ya que depende de la exposición de su cuerpo para ser algo en la vida. La cultura, a través de la educación formal e informal, determina que la mujer genere una dependencia de su físico para ser algo, para valer algo. Ese valor de “ser” algo -y no alguien- está determinado por cuan atractiva se encuentra ante los demás (el sexo opuesto por atracción, y pares por competencia), es por ello que depende necesariamente de la sobre exposición de su cuerpo con ropas cada vez más diminuta, ajustada y profusos escotes. Para lograr este objetivo, cada vez son más las que recurren a cirugías riesgosas, terapias varias o ejercicios.

Esta característica del género femenino de occidente se va incrementando en la población masculina y a esto se lo puede medir por la gran cantidad de fotolog de varones, entre otras cuestiones.

Todo esto no es otra cosa que demostraciones de la cultura light en la que vivimos, donde lo “light” no representa la ausencia de azúcar o grasa, sino de razón y dignidad.

Respecto a los pedófilos mencionados por Dayana, seguramente dentro de la comunidad religiosa los hubo desde entonces y antes. Pero cabe aclarar que no es patrimonio de ellos, ya que la mayoría de estos casos se dan entre familiares, son los mismos padres lo que abusan de sus hijos, como también muchos profesionales de traje y corbata, como el nefasto psicólogo Corsi, del que hablan tanto las noticias actuales. Se que el comentario era a cuento de los angelitos, pero me parece que vale la aclaración ya que hay mucho discurso famélico en contra de la iglesia dando vuelta, como si ésta fuera la fuente de toda desgracia. Que se mandaron las mil y una, no cabe duda, pero creo que lejos está el hombre común de tener razones para rasgarse las vestiduras por los errores u horrores de ella… si cada uno tomara conciencia de lo que realmente hace con cada acto, pensamiento, palabra y hasta con su forma de vestir, seguramente no habría tantos casos de pedofilia, de violaciones, de asesinatos a los seres humanos más indefensos e inocentes (aborto), de enfermedades de transmisión sexual (cada vez hay más casos de SIDA), de adicciones, etc, etc…

Pablo,
No era ese el sentido de mi mensaje con lo de los ángeles.
Quantum,
Mucho Magariños de Moretín, no?
No estoy tan segura que la cosa sea tan simple como “a los brutos les mostramos culos, a los intelectuales alemanes pinturas barrocas”.
Un culo es un culo en todo el mundo y nadie se tapa los ojos para no verlo.
Me parece que lo que fallan son los publicitarios por caer en el cliché y por no animarse a proponer cosas nuevas; y los clientes por no saber cómo quieren comunicar su marca y no animarse a aceptar las nuevas propuestas.
En este caso concreto, me asombraría saber que hay una agencia por detrás. Suena mas bien a que alguien encontró la foto, pensó que iba bien con su negocio de plásticos y se le ocurrió el aviso.
Saludos

Marcelo,
Una cosa es hablar de una publicidad por pésima y otra muy diferente es que Descartables La Recta se llene de plata.
De lo contrario todas als empresas harían publicidades malas para ser recordadas, o no?

Mira Dayana, si te vas a hacer problema por una publicidad de la Matices, mejor olvidate… La revista completa es un rejunte de cosas de mal gusto: los articulos, las notas, la distribucion, esta todo fuera de reglas. Parece que se pusieron de acuerdo todos los pasantes de periodismo, escritores, y gente comun que opina en esa revista y no tuvieron mejor idea que darles lugar a sus carreras frustradas para lograr tener una columna. Y la distribucion, bue, ya te habras dado cuenta de que negocian con la publicidad (el 60% de las paginas estan ocupadas con aivsos + los clasificados al final) y justifican la revista como medio de comunicacion poniendo esos articulos que dan nauseas.

La verdad Dayana que no le veo nada de mal gusto ni de bizarro por mucho que miro. Además si te fijás bien, encontras sutilezas tales como la combinación del amarillo en distintas tonalidades (“La Recta” con la almohada(?) de la mina, sin ir mas lejos)