Dayana

Cuando uno piensa en la zona de Orlando aparecen en la mente sólo los mega parques temáticos llenos de gente, las autopistas, las grandes cadenas hoteleras y los shoppings y outlets. Sin embargo, también hay mucho para conocer en áreas naturales.

Una de las actividades que se pueden hacer es viajar 83 km al sur de la ciudad para subirse a un airboat (las lanchas con grandes ventiladores que hemos visto en las películas y series) para recorrer una parte del gran lago Kissimmee durante una hora y media.

Durante el recorrido se puede ver la flora acuática y terrestre del lugar, y las aves y los aligators. Con un poco de suerte se pueden ver algún otros bichos como caracoles y tortugas.

Algunas cosas que aprendimos sobre los aligators es que comen animales pequeños porque luego de cazarlos los dejan para que se descompongan así son más fáciles de comer. Es por eso que en la zona conviven con ganado vacuno sin problemas.

Otro dato interesante, y que pueden ver en las fotos del final del post, es que cuando tienen cerrada la boca a los aligators no se les ven los dientes, a diferencia de lo que pasa con los yacarés sudamericanos y los cocodrilos de Africa.

Como muchos de los animales silvestres, no atacan al hombre a menos que se vean acorralados o si las hembras están con crías.

En mi lista de vehículos a los que me he subido puedo tachar a los airboats, que se deslizan auna velocidad bastante considerable sobre el agua y, para sorpresa de una señora que hizo el tour con nosotros, uno no va atado (hay que prenderse del asiento nomás).

Más allá de este destino en particular, me gustaría comentarles algunos detalles que pueden servirles de guía si están pensando en hacer tours similares para conocer la flora y fauna de entornos naturales:

• La época en que hagan la visita puede hacer muchísima diferencia en la experiencia global que tengan del paisaje.
• El año pasado viajé a los Esteros del Iberá en agosto y la vegetación estaba quemada por una gran helada que había caído en julio. Lo que siempre vi en fotos como un paraíso no eran más que yuyos secos en colores grisáceos, que me decepcionaron enormemente.
• Los viajes previos pueden condicionar mucho las experiencias posteriores.
  Tuve la suerte de conocer el Pantanal brasilero, que para mi sigue siendo un lugar insuperable en cuanto a belleza, diversidad de animales y plantas, la tranquilidad, etc. Cuando fui a los Esteros no sólo me decepcionó por la época, si no también porque no se parecía al paraíso que había visto en Brasil.
  Luego entendí que no tenía que buscar superar aquel viaje, si no disfutar cada paisaje en su contexto y en sus circunstacias.
• Al estar en lugares como esos, alejados de todo, con servicios básicos y sin la artificialidad de las ciudades, es que uno logra reconectarse con el Yo natural. Van a descubrirse perdiendo la mirada, respirando hondo el aire fresco y escuchando los ruidos del entorno en completo silencio ¡Aprovéchenlo!
• Si quieren vivir la experiencia que describí más arriba indefectiblemente tienen que elegir destinos no masivos. Por caso, Cataratas del Iguazú no es una buena opción por muy lindos que sean los saltos de agua.
• El grupo que los acompañe puede hacer una gran diferencia entre disfrutar del tour o fastidiarse porque hay gente que actúa como el peor de los turistas.
• A los espacios naturales hay que ir con conciencia ecológica. No tiren basura, no prendan fuego, no corten plantas y no perturben la tranquilidad del lugar.
• Respeten las indicaciones de seguridad de los guías y no pongan en peligro su integridad física ni la de las otras personas por sacar una foto.

Para más información sobre estos paseos pueden visitar la web de Kissimmee Swamp Tours.

Como curiosidad fotos de los bichos en los tres países:

Aligator, Lago Kissimmee, Florida, EEUU.

Jacaré, Pantanal, Mato Grosso do Sul, Brasil.

Yacaré, Esteros del Iberá, Corrientes, Argentina.