En este blog he criticado cosas cientos de veces y más de una hubo gente enojada o molesta por lo que dije, por lo que siempre me rondó por la mente escribir específicamente sobre este tema.
Por una cosa u otra lo dejé pasar, hasta que este fin de semana alguien se molestó en un grupo de Facebook por un comentario que hice y eso me disparó la necesidad de sentarme a escribir sobre este asunto de una vez por todas.
Para hacerlo simple, lo voy a poner como si fueran consejos de libro de autoayuda 😀
Paso 1 – No te tomes las cosas de modo personal, a menos que sean personales.
En este blog he reseñado muchos libros y algunas de mis críticas no han sido favorables. No me ha sucedido aún que alguno de sus autores se quejen por esto, pero si lo hicieran les diría precisamente esto: no es personal, solo estoy criticando a tu libro.
Podemos cambiar “libro” por “desempeño profesional” y es lo mismo. Me pasó con una agencia de prensa con la que trabajé durante un tiempo: por una situación muy desagradable le mandé un correo a un prensero diciéndole que su actitud y su forma de trabajar era inaceptable y al otro día su jefa me escribió diciéndome que no lo retara porque era un chico muy bueno y que le interesaba el cuidado del planeta (textualmente me dijo eso, ¡imaginen mi cara al leerlo!).
Quien recibe una crítica tiene que saber diferenciar de su Yo Público (ser el autor del libro o la cara visible de una empresa) de su Yo Personal (ser padre/madre, hijo/a, esposo/a, amigo/a, amante de la ecología, etc.), para no confundir comentarios negativos sobre su trabajo con que “no lo quieren”.
En este mismo sentido, cuando uno critica tiene que hacerlo desde un lugar no-personal. Tomando los mismos ejemplos de arriba, no tiene nada de malo decir que un libro es flojo por X o Z motivo, pero es más difícil de sostener una crítica donde uno diga que su autor es más zonzo que las arañas.
Paso 2 – Mentalizate: siempre habrá en este mundo alguien que no te soporta, no le gusta lo que hacés o que piensa que hablás boludeces.
Cuando uno comprende e internaliza que por más bueno y amoroso que uno sea siempre existirá alguien que lo detesta por las razones más inverosímiles, es que cae en la cuenta que es imposible conformar a todo el mundo.
Por eso mi sano consejo es: ¡ni lo intentes! Si tenés que ser un camaleón todo el tiempo para no ofender a nadie ¿en qué momento te vas a sentir bien con vos mismo?
No a todo el mundo le resulta fácil aceptar esto, pero mientras más se abre la cabeza a las críticas mejor se digiere este punto con el tiempo.
Paso 3 – Todo lo que hagas en público puede ser motivo de críticas. Aceptalo o quedate encerrado en tu casa.
A menos que uno quiera vivir en una cueva aislado de todo ser humano, siempre alguien va a tener algo que decir.
Volviendo al ejemplo del libro, he conocido autores que reaccionan diciendo que han trabajado muchísimo para lograr publicar su material, así que esperan que los críticos que leen su trabajo al menos les reconozcan eso. Si lo pensamos un poco ¡esa respuesta es la que podría dar cualquier autor!
Por otro lado, el producto final de cualquier trabajo una vez que está en la arena es reinterpretado por cada persona (y sus saberes y circunstancias) a la que se expone. Y en base a esto para algunos será una genialidad y para otros una porquería.
Si solo estamos dispuestos a aceptar los aplausos es probable que no soportemos la presión de las críticas que, invariablemente, van a llegar.
Paso 4 – Las críticas siempre existen aunque no seas consciente de ellas. No sirve que censures o que te tapes los oídos.
Aún cuando no te enteres qué opina la gente de vos, sabélo: ¡siempre hay gente que te critica!
Un ejemplo claro para cualquiera es el de los padres de hijos adolescentes (y no tanto). Todos hemos sido chicos y todos hemos dicho alguna vez “Mi viejo/a no entiende nada de la vida y se la pasa hablando boludeces” mientras nos mordíamos el labio inferior y revoleábamos los ojos. Es bueno recordar que teníamos la inteligencia suficiente como para evitar decirlo frente a el/ella, sobre todo antes de pedirle plata o permiso para salir 😛
Las dos posturas extremas para este caso son poco fructíferas: el hecho de que censures a quien te critica no significa que va a dejar de hacerlo. Además, puede que estés matando al mensajero que te comunica un problema.
Por otro lado, si hacés oídos sordos te estas perdiendo la posibilidad de tomar nota de un conflicto que no habías advertido para trabajar proactivamente en su resolución.
Paso 5 – Una crítica expresada es la voz de alguien que quiere ser parte de la conversación. Escuchalo.
Algo que me ha pasado muchas veces en el blog es que en una primera lectura una crítica me ha sonado a puteada, pero cuando la leí un par de veces más me pareció que simplemente era un comentario con un punto de vista fuerte expresado de una manera directa.
Lo bueno del blog es que tengo el margen de la relectura y de editarme varias veces antes de responder, cosa que no me sucedería si fuese en una charla cara a cara donde las reacciones rápidas quizás me jueguen una mala pasada.
Es por eso que es un sano ejercicio es LEER VARIAS VECES qué dice el mensaje de una forma consciente e identificar claramente a dónde apunta. Y si es necesario tomarse algunos minutos, respirar hondo y contar hasta 10 antes de responder 😛
Paso 6 – Las buenas críticas negativas suelen ser extensas y llenas de información. Prestales más atención que a los elogios.
Cuando estuve en la Book Blogger Con asistí a una charla sobre el manejo de las críticas negativas de libros. Noten cuán importante es el tema que le dedicaron un espacio específico del programa.
En la exposición una de las book bloggers comentaba algo con lo que estoy totalmente de acuerdo: para hacer una crítica negativa hay que escribir mucho más para poder fundamentar lo que no nos gusta. Como contrapartida a esto, los posts sobre cosas que a uno le encantaron suelen ser más cortos porque las palabras para describir lo que nos da placer nunca son suficientes. Curioso pero real, ¿no?.
Es por eso que si alguien escribe media página de críticas-negativas-no-personales te está dando un feedback más que interesante sobre algo que por ahí no viste o que no le diste importancia.
Paso 7 – Podés responder a las críticas como quieras, pero siempre haciéndote cargo de lo que digas y de sus consecuencias.
¡Este es otro punto que he aprendido a los golpes con el blog! Recuerdo que hace un tiempo una lectora me dejó este comentario:
DEBO CONFESARTE QUE AL PRINCIPIO TE CREI SIN CORAZON PERO HOY ME CONVENSI QUE LO TENES!
Creo que me lo dejó después de haber publicado mis radiografías de tórax 😛
Hablando en serio, hago la mea culpa de reconocer que no soy el paradigma de la ternura y la amabilidad para responder comentarios negativos… peeero me he mejorado mucho en estos últimos años a fuerza de darme cuenta que no podía ser tan bestia en las ocasiones donde, como decía arriba, si hubiera leído dos veces y contado hasta 20 me hubiera dado cuenta de todos estos puntos que vengo listando. Tropecé mil veces contra las piedras, pero algo he ido aprendiendo. Además, como se dice por ahí, “Pulirse es más fácil que reinventarse”.
Lo bueno es que cuando metí la pata no tuve el problema en reconocerlo y pedir disculpas. Y tampoco he tenido problema en sostener una posición en la que creo, aún cuando me mataran a puteadas.
Paso 8 – Hay un largo trecho entre decir que uno es abierto a las críticas y serlo efectivamente. Demostralo dando el ejemplo.
Si uno no se expone a las críticas, no abre los canales para que los demás opinen y si no escucha lo que otros dicen es poco probable que efectivamente sea la persona de mente abierta que dice ser.
Ser criticado no es lindo ni fácil, por lo que aprender a llevarlo de la mejor manera es algo que se logra con paciencia, sudor y lágrimas a medida que pasa el tiempo.
Paso 9 – Las personas con un espíritu crítico pueden ser molestas, pero son las que hacen avanzar el mundo. Soportalas lo mejor que puedas.
Uno de los contenidos recurrentes cuando estudié Diseño Gráfico fueron las vanguardias artíticas del siglo XX y cómo su impacto influyó esa época en los más diversos ámbitos. Todos esos movimientos tenían en común un espíritu crítico hacia la sociedad y sus valores establecidos, pero también eran apasionados en las posiciones que cada grupo artístico tomaba intrínsecamente y que se discutían en los salones de París.
En literatura uno de los periodos más interesantes es el del romanticismo, donde los autores no tenían pelos en la lengua para criticar de arriba a abajo a nadie y se daban auténticos duelos por carta entre ellos.
En la ciencia sucede lo mismo y varias de estas diferencias se pueden leer en el libro Científicos en el ring que ha sido reseñado en este blog y en Locos por la geología.
El pensamiento crítico es lo que nos hace avanzar como sociedad y nos permite revisar una y otra vez los postulados que andan dando vueltas por ahí.
Otra cuestión en este punto es que creo que hay lugares donde la crítica es mejor recibida que en otros.
Les pongo como ejemplo otra cosa que sucedió en la Book Blogger Conference:
Unas semanas antes del evento hubo un escándalo en la comunidad de book bloggers de EEUU porque una de sus referentes habia plagiado unos posts.
A la mina le dijeron de todo menos linda en su blog, en Twitter, en Facebook y en cientos de posts de blogs de la temática. Aún así la chica fue a la BBC.
En una de las charlas donde ella estaba presente al momento de las preguntas una de las bloggeras fue hasta el micrófono para consultarle a la representante de una importante editorial qué opinaba de los casos de blogs que plagiaban textos y si ellos trabajarían con alguien así. A continuación estalló un aplauso cerrado en el auditorio de 500 personas.
Guille y yo sólo dijimos “Uhhhh” y nos quedamos pensando cuán diferentes son las cosas allá donde a nadie le tiembla la pera para criticar a un referente si consideran que lo merece. Por eso es que ellos son los que marcan tendencia mientras nosotros nos creemos vivos fomentando el amiguismo de la boca para afuera y criticando como chusma vieja por detrás.
Paso 10 – Si sos sensible a las críticas y te cuesta soportarlas, es porque necesitás trabajar más en los nueve puntos anteriores.
Si querés dedicarte a cualquier actividad de social media donde el palo en el lomo está a la orden del día y donde todos se creen guapos por hacerlo, tenés que entender que el verdadero arte está en aceptar las cartas que te tocan para poder barajar y dar de nuevo.
Y también digo que sirve para la vida porque todos alguna vez vamos a experimentar críticas negativas en lo profesional, sea cual sea nuestra actividad, y tendremos que lidiar con ellas para seguir adelante.
Y a las críticas personales trabajalas en terapia con tu psicólogo de confianza.
Bonus track: los trolls y la gente que rompe las bolas porque el aire es gratis existen, así que sentite libre de mandar a la mierda (teniendo en cuenta el paso 7) a los que entren en ese grupo 😀 Acá un ejemplo de ese caso.