El libro de hoy no está en ninguna de las listas publicadas, pero como lo leí voy a hacer la reseña a pesar de que no es un libro que recomiendo.
Este título forma parte de una trilogía, fue best-seller del New York Times y el texto será adaptado al cine por Disney. Como pueden ver tiene todos los ingredientes pochocleros posibles que hacen que me sienta tentada de utilizar el adjetivo “Comercial” para referirme a él. Como siempre digo que toda literatura es comercial en tanto y en cuanto los autores escriben libros para venderlos, así que me abstendré de calificarla en un sentido peyorativo con esa palabra.
La historia: Cassia es una adolescente de 17 años que vive en un país sin especificar que está gobernado por la Sociedad, un sistema que controla por todos los medios la vida de sus ciudadanos desde que nacen hasta que mueren. El control se aplica a todo: desde qué comerán hasta con quién se casarán.
A los 17 años los jóvenes son llevados a un banquete de iniciación donde se les presenta a sus parejas elegidas por un sistema que hace las mejores uniones en base a estadísticas y probabilidades.
Cassia es emparejada con su mejor amigo Xander pero, al día siguiente, ve que su pareja podría haber sido Ky, otro chico que conoce.
A partir de ese descubrimiento la chica empezará a desentrañar y cuestionar algunas de las normas de la Sociedad.
Mi opinión: leí los primeros párrafos y ya sentí que odiaba el libro. Creo que me duró hasta la página 250 más o menos, recién ahí empieza a haber acción realmente. Así que en líneas generales ha sido uno de los libros más decepcionantes con los que me he cruzado este año.
Repaso algunos de los problemas más graves:
- Trilogía: mi teoría es que esta historia fue escrita como un solo libro medianamente bueno al que luego le agregaron 800 páginas de relleno para convertirlo en tres (tiene 350 pgs cada tomo).
Solo eso explicaría por qué hay capítulos y capítulos donde no pasa nada relevante, donde los diálogos son chatos, donde los personajes son huecos, donde uno podría saltearse todo y aún tendría sentido la historia. - Distopía: es un género muy de moda en Estados Unidos desde donde han llegado ésta y otras varias traducciones en el estilo novela best-seller.
Para quienes no conocen el género se trata de lo contrario a la utopía. En lugar de mundos donde se alcanza la felicidad y el bienestar, la distopia propone que el futuro llegará en forma de sociedades donde no existe la privacidad, la libertad y que todo será controlado por un entramado burocrático que mantiene alienados a los habitantes que no se rebelarán nunca contra él.
Los ejemplos más conocidos son la trilogía Matrix en cine, y los libros 1984 de Orwel, Un mundo feliz de Huxley y Fahrenheit 451 de Bradbury.
No es un género por el que me sienta particularmente atraída, pero me encanta si se trata de una historia bien contada. Y no es este el caso. - Estilo narrativo: desde diálogos mecánicos y poco fluídos, pasando por un uso insoportable de los vocativos para ir narrando qué hace cada personaje, hasta descripciones irrelevantes dentro de situaciones irrelevantes en capítulos irrelevantes, nada logra formar un texto limpio en mi cabeza.
Este punto se puede ilustrar bien con una cita a Augusto Monterrosoy su decálogo de consejos para escritores:Cuarto. Lo que puedas decir con cien palabras dilo con cien palabras; lo que con una, con una. No emplees nunca el término medio; así, jamás escribas nada con cincuenta palabras.
- Intertextos con otros libros: obviamente los cruces con obras clásicas son inevitables, pero este libro las hace con una calidad ínfima a las originales. Algunos ejemplos:
– La mención de Sísifo.
– La mención de Dylan Thomas.
– La mención a tres pastillas misteriosas (verde, azul y roja) que tienen todos los habitantes. Acá casi que se ha copiado a la archifamosa escena de Matrix. Una pista de qué pastilla tiene preponderancia en cada tomo se encuentra en el diseño de la portada de cada título (adjunto la imagen de los tres tomos en su versión en inglés). Esta lógica de los colores se repite en los tonos que representarán los paisajes de cada libro.
– Muchos otros detalles me parecieron cosas que ya leí en los clásicos mencionados arriba, pero en una versión pésimamente escrita. En esta historia se destruyen libros como en la novela de Bradbury, sin ir más lejos. - Historia de amor: es bastante tonta porque los personajes lo son (salvaría a Ky que es un poco más complejo). Para ser una historia de adolescentes, y por más sociedad opresora que tengan encima, no hay casi nada de pasión. Algún que otro beso y paremos de contar. De sexo ni hablemos.
- Final del primer libro: cuando la cosa se pone más o menos buena, el libro se termina dejando con la intriga de qué pasó con la protagonista y sus amores. Al igual que en las telenovelas, la autora nos hace esperar hasta la próxima.
Puedo aceptar que se enganche a un lector para un próximo libro indirectamente (Harry Potter lo hace, por ejemplo), pero este caso ha sido alevoso.
En síntesis: yo no recomiendo este libro porque les estaría diciendo que van a tener que comprar los tres para que la historia cierre. Si quiere leer una historia distópica en UN SOLO LIBRO, ésta no es su opción.
No suelo leer reseñas de otros blogs para no influenciarme a la hora de escribir el post, pero con este título quería sacarme la duda y fue muy extraño lo que encontré. La mayoría de las reseñas estaban hechas por bloggeras adolescentes a las que el libro les había parecido tan maravilloso que hasta pensé que tenía que pellizcarme para ver si estaba despierta o dormida porque habíamos decodificado cosas totalmente diferentes.
Lo loco era que cuando iba a los comentarios de los posts me encontraba con frases como “He leído demasiadas críticas negativas de este libro”. ¿Dónde las habrán leído? A mi me costó mucho encontrarlas.
Quizás el público adolescente tiene a libros de este tipo como lecturas puente para más adelante animarse a los textos consagrados (y bien escritos) del género. O quizás realmente a alguien le parezca genial. A mi la verdad me decepcionó más de lo que suponía que lo iba a hacer.
Como siempre digo: que a mi no me guste es una cuestión subjetiva, quizás a uds les encante y sería genial si comparten sus impresiones en los comentarios.
Bonus track: el autógrafo de Ally Condie.
Cuando estuve en junio en la Book Blogger Con en Nueva York tuve la posibilidad de hacerle firmar el libro a la autora, y por eso acá las dejo una foto del libro.
