Cuando una habla de un autor suele usar el nombre completo o el apellido; pero cuando hablo sobre sus libros siempre me refiero a “Verónica” como si nos conociéramos.
Es esa cercanía linda que da ser lectora de su blog desde hace años, la de haber intercambiado unos cuantos mails con ella y la de haber recibido y leído La cena del dinosaurio y La última palabra para comentarlos con ustedes.
Recuerdo que cuando revisaba la lista de los 300 libros recomendados por el Plan Nacional de lectura me puse contenta al saber que “Alas…” estaba ahí y que mi escritora bloggera favorita estaba presente.
Debo confesar que en ese momento pensé que iba a ser complicado conseguir un libro de 1993 para reseñar. Sin embargo, revisando estantes en una de las bibliotecas de la que soy socia ¡lo encontré! Tengo entre mis manos una reedición de 2005 🙂
Este cuento fue el ganador del primer premio de un concurso organizado por Ed. Colihue en 1992 y está incluido en la colección Pajarito Remendado.
La historia
Alan gusta de una chica de trenza que se cruza en el museo durante una visita escolar. Llegar a hablar con ella parece imposible por la constante e inoportuna intervención de su maestra. La nena le indicará el camino para que puedan volar juntos hacia un espacio de libertad.
El cuento me gustó, sobre todo porque la construcción de los personajes es realista con la forma de comportarse de los chicos de esa edad. Tiene humor, amor y también una cuota de prosa poética en el final.
Es un buen cuento para el aula porque la docente y los chicos se sentirán plenamente identificados con los comportamientos en los paseos escolares.